Extracciones dentales no quirúrgicas
La remoción de una pieza dental es uno de los procedimientos más habituales en las clínicas odontológicas, aunque no por ello deja de ser también uno de los más temidos por los pacientes. La creencia de que las extracciones dentales resultan dolorosas hace que muchas personas retrasen su visita al dentista con el riesgo de que su salud bucodental se vea afectada.
Pero, ¿sabes qué resulta más doloroso? Permanecer con una muela o diente fracturado o con una caries que, de no tratarse a tiempo con un empastado o endodoncia, podría derivar en la necrosis y pérdida de la pieza.
El dentista recomienda
Como expertos en salud bucodental en Madrid, tenemos muy presente la importancia de conservar los dientes naturales durante el máximo tiempo posible, por lo que nuestro consejo es que, ante cualquier molestia en la dentadura, consultes siempre con tu especialista para ver qué opciones tienes antes de proceder a una extracción dental.
Cuándo es necesaria una extracción dental o exodoncia
Una extracción dental puede estar motivada por diversas causas: que en la boca no exista suficiente espacio para todos los dientes (algo frecuente con las erupción de las denominadas muelas de juicio), que una porción del diente o del hueso se haya visto afectada por una infección; que exista fractura o ruptura como consecuencia de un golpe, o que una caries haya penetrado hasta la raíz de la pieza.
Nuestros técnicos estudian las características de cada caso y realizan una serie de pruebas preliminares para determinar la longitud del diente, su posición y el grado de dificultad de la extracción.
Las exodoncias simples son procedimientos rápidos y se realizan en consulta con anestesia local. El especialista utiliza un elevador y unos fórceps para aflojar el diente y facilitar su extracción. Una vez que la pieza está fuera, se le pide al paciente que muerda una gasa esterilizada para reducir el sangrado hasta la coagulación de la herida, que, con posterioridad, será tratada mediante enjuagues suaves y la administración de antiinflamatorios orales.
¿Duele una extracción dental?
Las molestias que se experimentan tras la extracción de un diente son normales, el malestar disminuye a los pocos días de la intervención y se puede reducir con el empleo de analgésicos y la aplicación de hielo en la cara.
En casos puntuales en los que la exodoncia no pueda completarse sin acción quirúrgica, derivamos al paciente a un cirujano bucal para realizar la extirpación mediante intervención ambulatoria.