El esmalte dental desempeña una importante función protectora, pero en las dentaduras apiñadas puede resultar conveniente disminuir el espesor del diente en favor de la armonía del conjunto. El stripping dental es una técnica que permite ganar un espacio extra entre piezas dentales para garantizar el éxito de las ortodoncias.
Un poco de historia sobre la reducción interproximal
Como todas las técnicas médicas con nombre en inglés, te parecerá que el stripping dental es un procedimiento de lo más moderno. Sin embargo, este recurso tan práctico en los tratamientos ortodóncicos ni es algo nuevo ni tiene un nombre exclusivamente anglosajón.
En español nos referimos a él como ‘reducción interdental’ y su origen se remonta a 1944. Fue el doctor Murray L. Ballard el primero en sugerir la posibilidad de pulir los espacios interproximales para favorecer la movilidad del diente. El stripping dental manual presentado por L. Ballard evolucionó hacia técnicas mecanizadas con la aparición, en la década de los 80 del siglo pasado, del Air-rotor stripping (ARS) de John J. Sheridan.
Desde finales del siglo XX, la técnica de reducción interproximal (IPR, por sus siglas en inglés) ha ido mejorando para permitir un trabajo más preciso y con mejores resultados. En la actualidad, el stripping dental es una práctica habitual en las clínicas dentales para tratar los problemas de apiñamiento antes de comenzar un tratamiento de ortodoncia o incluso cuando esta, en el caso de ser fija, ya está cementada.
¿Qué es el stripping dental y cuándo se emplea?
Para desplazar los dientes apiñados o desalineados hacia su posición correcta hace falta espacio. En ocasiones este se obtiene mediante la extracción de piezas dentales como, por ejemplo, los terceros molares. Pero no siempre es necesario recurrir a esta técnica que, por otro lado, requiere de más tiempo de ejecución y de recuperación.
El stripping dental o reducción de espacios interdentales es un método mucho más rápido que se puede emplear en múltiples escenarios de maloclusión como consecuencia del apiñamiento. Consiste en pulir, de forma medida y controlada, parte del esmalte dental sin llegar a la dentina y, por lo tanto, sin dañar el diente.
Con la técnica del stripping es posible ampliar el hueco interproximal de 1 a 10 mm, respetando los límites biológicos de cada paciente y asegurando el espacio necesario para que el empleo de ortodoncias sea un éxito. Es un proceso selectivo y de precisión que, en apenas unos minutos, soluciona el problema del apiñamiento y facilita el desplazamiento de las piezas dentales.
Esta intervención también resulta útil en el tratamiento de las troneras, esos huecos negros que se ven en ocasiones entre dientes contiguos. Las troneras son comunes en los dientes que tienen forma triangular y en aquellas dentaduras en las que se ha producido una disminución de la papila dental. En principio, no suponen un riesgo para la salud de la boca siempre que se mantenga una buena higiene pero, desde una perspectiva estética, afean la sonrisa.
¿Cuándo está contraindicado el stripping dental?
La anatomía de cada diente y las condiciones en las que se encuentra la boca varían en cada paciente. Antes de realizar una reducción interdental es necesaria la evaluación clínica del caso porque, aunque este procedimiento no supone ningún riesgo en una dentadura sana, está contraindicado en algunas circunstancias:
- Pacientes con gingivitis o enfermedad periodontal.
- Higiene bucal deficiente.
- Problemas de descalcificación del diente.
- Presencia de caries interproximales.
- Dentaduras en proceso de desarrollo.
- Dientes rotados (primero hay que corregir la rotación) o muy rectangulares.
- Hipersensibilidad.
Ventajas de la reducción interproximal
- Es una técnica rápida y sencilla.
- Evita la extracción de piezas dentales y otras técnicas más complejas.
- Se puede determinar la cantidad de espacio a ganar, algo que no ocurre con una extracción.
- Ahorra tiempo en el tratamiento de ortodoncia.
- Elimina los antiestéticos triángulos negros interdentales.
- Reduce la necesidad de movimiento dental.
- Aumenta la estabilidad de las rotaciones obtenidas.
- No presenta efectos secundarios.
- Apta en cualquier etapa del tratamiento ortodóncico.
Desventajas del stripping dental
- Es un método irreversible. El esmalte eliminado no se recupera.
- Solo se puede aplicar en determinados dientes y posiciones. No es apto para dientes muy rotados.
- En algunos pacientes, el stripping provoca surcos en el esmalte visible que no desaparecen con el pulido.
- Si la reducción del tejido dentario no es la adecuada, puede derivar en problemas de maloclusión.
¿Stripping dental mecánico o manual?
Hay dos técnicas básicas en la realización de un stripping dental:
Método manual
Es el procedimiento tradicional. Para reducir la capa de esmalte se emplean unas tiras de pulido de unos 15 cm de largo y diferentes tipos de ancho (entre 4-8 mm) que permiten al especialista trabajar con comodidad.
El potencial de abrasión está determinado por el granulado de la superficie, más grueso o más fino en función de la cantidad de esmalte que se quiera eliminar con cada pasada. Para garantizar un pulido de calidad se suele utilizar un recubrimiento de óxido de aluminio y diamantado por una o dos caras y un grosor estándar de 0,2 mm que facilita su introducción en los espacios interdentales.
Las tiras de stripping permiten trabajar solo en un diente o en dos dientes contiguos de manera simultánea. Es solo una cuestión de diseño: algunas tienen una cara granulada y otra lisa que respeta la superficie del diente que no se quiere modificar, y otras son rugosas por ambas caras.
Método mecánico
Cuando hay que eliminar mayor cantidad de esmalte o trabajar en los dientes posteriores, donde el acceso está más limitado, se suele recurrir a métodos mecánicos. Estos permiten obtener un mayor hueco entre los dientes en menos tiempo y con extraordinaria precisión.
El método de stripping mecánico se puede poner en práctica de varias formas:
- Lijas abrasivas a alta velocidad: las lijas se colocan sobre un dispositivo que realiza movimientos oscilatorios para acelerar el desgaste que se pretende obtener.
- Discos abrasivos a alta velocidad: en el cabezal de un micromotor eléctrico se aplica un disco cortante en toda la superficie o solo en el borde exterior. Se cambia el grosor del disco conforme se consigue avanzar a la base del diente.
- Fresas de diamante a ultravelocidad: es el método ARS diseñado por Sheridan y se emplea con ortodoncias ya cementadas. En el procedimiento se utilizan fresas intercambiables de punta plana o redondeada y se aplica agua en spray para controlar el calor friccional.
Bien sea de forma manual, bien con el método mecánico, el especialista realiza el trabajo con pequeños avances que garantizan la reducción de superficie idónea. Para determinar si se ha obtenido ya el hueco necesario se emplean unas lengüetas con medidas estándar que proporcionan información fiable de la reducción practicada.
¿El stripping dental duele?
Hace ya mucho tiempo que la medicina y la tecnología permiten poner en práctica tratamientos dentales indoloros. La reducción interproximal es otro de tantos procedimientos en los que el paciente no experimenta ninguna molestia destacable salvo, en casos concretos, cierta sensibilidad. Tanto es así que ni siquiera es necesaria la aplicación de anestesia.
Ya sea de forma manual o mediante el empleo de un sistema mecánico, el stripping dental se realiza en consulta, en apenas unos minutos y sin que sea necesaria ninguna pauta de recuperación posterior. Es una técnica tan superficial y medida que no provoca daños en el diente, solo reduce su ancho para conseguir un espacio extra que favorezca la eventual alineación de la dentadura.
La única recomendación es que seas riguroso con la higiene dental y te esmeres en retirar los restos de comida que se hayan podido quedar acumulados en esos espacios interdentales. La concentración de sarro en la zona taponaría el hueco e impediría su aprovechamiento en el proceso de recolocación de los dientes. El uso regular de hilo dental, cepillos interproximales o un irrigador bucal te permitirá tener un mayor control sobre la limpieza hasta que el hueco entre dientes se haya cerrado por completo.