Sin restarle importancia a la salud oral, aspecto siempre prioritario, la estética de la sonrisa ha ido ganando protagonismo en la oferta de tratamientos que actualmente ofrecen las clínicas dentales. El rejuvenecimiento de la sonrisa, en su sentido más amplio, es un área de trabajo que permite que la imagen de la boca sea también el reflejo de unos dientes y encías saludables.
Aspectos que intervienen en el diseño de la sonrisa
¿Puede la sonrisa delatar tu edad? En cierto modo, sí. Por este motivo, así como hay otros tratamientos anti aging para disimular las patas de gallo o las manchas en la piel, también hay algunos trucos estéticos para rejuvenecer la sonrisa. Y es que si hay algo peor que el hecho de que la boca revele nuestra edad, es que lo haga de forma errónea.
La estética de la sonrisa no es un concepto subjetivo. Cuando una boca nos resulta más o menos atractiva es porque presenta unos rasgos característicos. Aunque como observador tal vez no te des cuenta de lo que está haciendo que esa sonrisa sea hermosa, desde la perspectiva profesional sí que podemos decirte dónde está el quid de la cuestión:
- El labio superior queda justo por encima de la línea de los dientes.
- Existe armonía y proporción en el tamaño de las piezas dentales.
- La dentadura está alineada, sin presencia de desviaciones ni troneras.
- Las encías tienen un color rosado saludable.
- Los dientes tienen una tonalidad natural, uniforme y sin manchas.
- Existe balance y simetría entre dientes, labios y encías.
Teniendo en cuenta las características que definen la belleza de la sonrisa, se pueden deducir las diferentes perspectivas desde las que se trabaja para la obtención de un diseño perfecto:
- La línea media dental, que establece la simetría de la sonrisa y tiene mucho que ver con la alineación de los dientes.
- El margen gingival, que en una sonrisa perfecta está siempre nivelado de manera que cada diente presenta la altura adecuada.
- La exposición gingival, que revela la cantidad de encía que queda expuesta al sonreír.
- La tonalidad de dientes y encías, que será más atractiva cuanto más natural y saludable resulte.
¿Qué tratamientos existen para rejuvenecer la sonrisa?
El ámbito de la odontología estética ha experimentado un gran avance en las últimas décadas y está en continua evolución. En la actualidad, prácticamente cualquier defecto de forma, posición o color de la dentadura puede ser tratado en la consulta del dentista sin necesidad de una intervención quirúrgica o con procedimientos que no revierten gran complejidad.
Entre las prácticas más habituales en las clínicas dentales que ofrecen servicios de diseño de la sonrisa destacan:
- Carillas dentales: láminas adheridas a la superficie del diente para mejorar su morfología y color.
- Ortodoncias: métodos cada vez más avanzados como el del sistema Invisalign permiten corregir la posición de los dientes y la mordida sin que se note que llevas ortodoncia. Este sistema es un claro ejemplo de cómo salud y estética son aspectos compatibles.
- Blanqueamiento dental: técnicas de fotoactivación que permiten eliminar manchas y blanquear el tono de la dentadura de un modo no invasivo.
- Gingivectomía estética: recorte de las encías para subsanar el problema de la sonrisa gingival y exponer una mayor superficie dentaria.
- Injerto de encía: recomposición de las encías retraídas para proteger la raíz del diente al tiempo que mejora su apariencia. Corrige también los espacios interdentales negros o troneras.
- Prótesis sobre implantes: sustituyen los dientes con nuevas piezas de acabado muy natural que van ancladas a una raíz artificial (implante), normalmente de titanio.
- Cirugía estética periodontal: procedimientos para corregir los problemas estéticos derivados de la periodontitis y otras enfermedades periodontales.
Ácido hialurónico: posibilidades estéticas más allá de la cavidad bucal
Algunos de los desequilibrios que impiden que una sonrisa sea perfecta no están en el interior de la boca sino en el rostro. La piel que rodea los labios es propensa a la aparición de líneas de expresión y arrugas que pueden comprometer el atractivo de los rasgos faciales.
El diseño de una sonrisa estupenda y rejuvenecida culmina en muchos casos con tratamientos de estética en los que se emplea ácido hialurónico. Esta es una sustancia natural que segrega el propio organismo y que garantiza, entre otros aspectos, el volumen, la hidratación y la tersura de la piel.
La aplicación de ácido hialurónico en el rejuvenecimiento de la sonrisa se realiza mediante pequeñas infiltraciones en zonas muy bien definidas:
- Surco nasolabial, que se extiende a ambos lados de las aletas de la nariz.
- Arrugas periorales, que aparecen justo debajo de la nariz.
- Comisuras labiales, justo donde se juntan el labio superior y el inferior.
- Contorno de los labios, la línea que los delimita.
- Labios, con el objetivo de aumentar su volumen.
Aunque resulte obvio, es importante insistir en que las infiltraciones de ácido hialurónico en la zona peribucal deben ser realizadas siempre por un profesional acreditado. El hecho de que no sea necesario pasar por el quirófano no le resta importancia a una intervención de medicina estética que debe contar con todas las garantías de seguridad.
Beneficios del rejuvenecimiento de la sonrisa
La transformación de la sonrisa es un proceso que no se puede tomar a la ligera. Aunque suponga una mejora estética importante, hay que tener en cuenta que los cambios pueden modificar de manera sustancial la expresión. ¿Cuál es el modo más seguro de realizar este cambio? Apostar por la naturalidad.
No busques cambios radicales con labios muy voluminosos o dientes tan relucientes que no parezcan reales. La belleza de la sonrisa es armonía y equilibrio: cuanto menos se noten los retoques, más atractivo resulta el efecto obtenido.
Esto no quiere decir que no haya motivos suficientes para atreverse con un cambio. El rejuvenecimiento de la sonrisa con un buen asesoramiento profesional presenta grandes beneficios:
- Aumenta tu seguridad al hablar y relacionarte socialmente.
- Mejora la autoestima.
- Te permite expresar tus emociones sin complejos.
- Retrasa los efectos del proceso fisiológico natural del envejecimiento.
- Aporta vitalidad y frescura al conjunto de tu rostro.
¿Eres el candidato para tener una sonrisa perfecta?
No hay motivos por los que cualquier persona no pueda mejorar la estética de su sonrisa mediante estos procedimientos. Sin embargo, hay que tener en cuenta que en muchos casos, aquello que está comprometiendo el atractivo de la sonrisa tiene su origen en los malos hábitos.
Para que cualquiera de los tratamientos propuestos por un especialista tenga éxito, antes habrá que corregir los problemas subyacentes a la estética bucodental. Cuestiones como una mala higiene oral, las pautas de alimentación inadecuadas, el tabaquismo o una deglución incorrecta pueden influir en la belleza y armonía de tu boca. Para disfrutar de las ventajas que proporciona el rejuvenecimiento de la sonrisa y mantenerlas en el tiempo, antes hay que poner remedio a estas cuestiones.
Por otro lado, cualquier persona con voluntad de cambio y con la paciencia que exigen algunos de estos tratamientos, es candidata a un rediseño de la sonrisa. Los principales requisitos que debe cumplir el paciente son:
- Estar dispuesto a modificar los hábitos que están perjudicando a su dentadura.
- Anteponer la salud dental a cualquier aspecto estético. Lo más importante es tener una boca sana. Si tu odontólogo considera que algún tratamiento no es el más adecuado para ti, confía en su experiencia.
- Cumplir con rigurosidad las pautas y recomendaciones del especialista que lleva a cabo el tratamiento. Es importante acudir a centros acreditados y que el proceso esté siempre supervisado por un profesional. Nada de tratamientos milagro y en casa.
- No perder la ilusión durante el tiempo que dure el tratamiento. Algunos tienen efectos inmediatos pero otros pueden demorarse meses e incluso años en ofrecer los resultados deseados.